JOKER
De entrada creo que JOKER tiene grandes y claras referencias a Scorsese; sí, “El rey de la comedia” y “Taxi driver” son las principales vertebras que sostienen al film; un personaje a quien la sociedad ha abandonado y debe reinventarse para no ser devorado en la selva de asfalto -aquí llamada Ciudad Gótica- pero además, el cine de Scorsese está presente en varios cuadros, diálogos, secuencias. Las motivaciones de muchos de los personajes bien podrían ser las mismas que vimos en “The departed” y el dolor palpable frente a una enfermedad mental tal como lo vimos en “The aviator”. Pero no solo Scorsese está presente, hay referencias a David Fincher y su “Fight club”, especialmente al resaltar la belleza dentro del verdadero caos, además, mientras veía Joker pensaba en los paralelismos y semejanzas que tiene con “Tarde de perros” de Sidney Lumet, ya que en ambas la sociedad y su desesperación mal llevada por los medios de comunicación terminan por quebrar a sus protagonistas (de diferentes maneras claro está). Todo ello coloca al film en una posición alejada de las películas de cómics “tradicionales” y la acerca más al cine negro, lo que podría jugar en su contra a la hora de clasificarla en los films de DC y Marvel, mas no a la hora de ser nominada/premiada -ya lo vimos en Venecia-.
Por otro lado, el guión apunta mucho más a conocer la historia, el origen, las motivaciones y sueños del protagonista (nuevamente al estilo de "El rey de la comedia"), si bien hay efectos especiales y explosiones, éstas no resultan al por mayor o sin motivo como en “The avengers”, no, aquí todo sucede por alguna buena razón, (al estilo de la trilogía del Batman de Christopher Nolan) y es para contar el nacimiento de la locura de Arthur Fleck, y ello fue lo que más me atrapó. Como seguramente sabrán, hay múltiples teorías respecto a la etiología de la locura, por ejemplo; dentro del psicoanálisis, Lacan utiliza los términos Real, Simbólico e Imaginario para señalar registros o dimensiones que se encuentran anudadas y que posibilitan el funcionamiento psíquico, sin embargo, cuando alguno de esos registros se desanuda o falla, se puede vislumbrar alguna psicosis, es así como podemos entender el verdadero origen de los trastornos del auto nombrado JOKER. También para Lacan es el Padre quien debe nombrarnos y con ello darle cabida a la ley, pero aquí veremos cómo es el mismo Arthur quien le pide a un padre (imaginario o real, nunca lo sabremos y no les puedo decir quién es, pero cuando la vean sabrán) que lo nombre, sin embargo ese padre (?) se niega a reconocerlo, por lo que debe buscar un nuevo padre (imaginario) lo que resulta en un desanudamiento de sus tres registros y… lo demás ya lo podrán ver ustedes a detalle. Lo que sí les puedo asegurar es que si bien ya tuvimos varios films basados en cómics donde se trata de explorar en la psique de los héroes -por ejemplo LOGAN-, en esta ocasión se hace un verdadero cuadro diagnóstico y se lleva a un nivel que nunca habíamos visto dentro del género, reiterándoles que quien mejor lo había intentado fue Nolan, director que durante 3 actos nos fue mostrando el origen, desarrollo y madurez de Batman-. Pero la gran diferencia radica que en esta ocasión el personaje principal es el villano, de hecho su némesis ni siquiera tiene cabida aquí, pues el mensaje que se pretende dar es otro, aquí nos toparemos con una Ciudad Gótica fría, áspera, desinteresada, no hay hombre murciélago que pueda lidiar contra eso, todo al grado de hacernos cómplices y meditar si somos nosotros mismos quienes orillamos a los olvidados y relegados a convertirse en villanos cada que afirmamos que los marginales no tienen derecho a ser reconocidos, mucho menos a recibir afecto, pero eso sí, clamamos por algún héroe superyoico que limpie nuestro actuar. Claro está que eso ya lo hemos visto en películas sobre trastornos mentales como “Atrapado sin salida”, “Inocencia interrumpida” y “Psicópata americano”, la diferencia radica que en esta ocasión se usa el nombre del archienemigo de uno de los justicieros más icónicos como telón de fondo para contarnos un drama mental.
Sí, la película es cruda, a diferencia de las siempre esperanzadoras cintas de Marvel y de la misma DC, aquí nos escupen una verdad a la cara y nos hacen cuestionarnos momentáneamente respecto a quién es villano y quién víctima en una sociedad marcada por el consumismo, por la falta de límites y la apabullante premisa de “tener que ser feliz”, creando incluso una apología de la violencia y llevándonos a un hiperrealismo al grado de olvidarnos que “simplemente” estamos viendo una película “de súper héroes” y hacernos creer que estamos frente a algo más complejo, donde los roles familiares resultan fundamentales ante la estructura de un asesino en ciernes, tal como lo vimos en “Tenemos que hablar de Kevin”, “Psicosis” e incluso “Carrie”, cintas donde la imagen materna juega un papel crucial (al igual que aquí) y donde no hay buenos ni malos, solamente personajes viviendo su locura. Otra cosa realmente bien llevada, es el manejo de los discursos, sin spoilear les diré que verán a un Thomas Wayne muy distinto al que están acostumbrados a ver (a mi parecer esta vez se parece más a Trump cuando estaba en campaña diciendo que los migrantes son pobres porque quieren y que solo él podría "hacer grande a América de nuevo") y ello les hará cuestionarse sobre quién dice la verdad en una ciudad donde todos juegan a ser quien no son, donde Wayne llama payasos a los relegados y es promotor de quitarles las ayudas sociales a los desfavorecidos.
Por último, todo lo que han leído respecto a Joaquín Phoenix y su excelsa actuación es verdad; como verdadero fan del histrión, fácilmente puedo pensar en ésta como una de sus 3 mejores actuaciones -a mi parecer junto a “Her” y “You Were Never Really Here”- así que muy seguramente oiremos su nombre en todas las premiaciones y probablemente en más de una levantará estatuilla, lo mismo que el director y guionista, cosa aparte es la apabullante música de Hildur Gudnadottir, la chelista que nos puso los nervios de punta con Chernobyl. Los fans del personaje saldrán satisfechos al conocer una nueva historia nunca antes vista (dentro del universo de historietas) pero sumamente bien lograda y bastante madura, totalmente a la altura del personaje, suficiente para olvidarnos del ridículo joker de Jared Leto. Por primera vez veremos crudeza real en una cinta de este tipo y no muertes banalizadas como en “Deadpool” ni diálogos absurdos como en las últimas películas de Spiderbobo.
Así que definitivamente estamos frente a una película que trascenderá para ocupar un nicho a lado de todos esos clásicos que ya mencioné y si bien, eso la aleja de las películas de su género, eso definitivamente es un verdadero cumplido, en mi caso mis amigos me han dicho; "más bien parece como cine de arte", "es una drama donde han puesto un personaje famoso, pero si no fuera ese villano, sería una de tus películas raras". así que ya saben, no verán explosiones intergalácticas, pero si saldrán pensando si el Joker es realmente un villano o solamente un producto de la sociedad que no quiere verlo.
Me encantó
ResponderBorrarLa peli o la reseña?
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